Hace unos días Uber hizo publicas sus cuentas de resultados, donde se pudo apreciar como los ingresos de la firma son de alrededor de $11.300 millones y que ha tenido unas pérdidas de $1.800 millones durante el periodo de 2018.
Unas cifras bastante elevadas que ponen en duda la sostenibilidad del modelo de negocio, sin embargo, la manera de alcanzar la rentabilidad por parte de Uber parece clara: Crecer rápido.
Debido a la falta de tiempo, y sabiendo que la salida a bolsa se espera durante 2019, Uber parece que va a continuar persiguiendo un modelo de crecimiento basado en compra de empresas.
En este post veremos que tipo de empresas está adquiriendo últimamente y cuál es la estrategia que hay detrás de cada una de estas acciones en concreto.
Careem
Adquirida el 26 de marzo de 2019 por $3.100M, es la empresa de movilidad competidora más grande de Uber en Oriente Medio, a finales de 2018 contaba con más de 30 millones de usuarios repartidos en 120 ciudades de Oriente Medio.
Esta adquisición es muy relevante ya que marca la estrategia de Uber por crecer en Oriente Medio, algo que puede parecer normal debido a que uno de los mayores inversores de Uber es el propio fondo soberano de Arabia Saudí.
Estrategia que choca completamente con las desinversiones que Uber está realizando en China y en el sureste asiático.
Jump Bikes
Jump Bikes es una empresa centrada en el negocio de “motosharing” y “bikesharing” que actualmente opera en EEUU, Alemania y Portugal.
La empresa fue comprada en abril de 2018 por $200M con el objetivo de expandir su área de acción por todo Europa y de poder ofrecer un cross-selling desde la propia aplicación de Uber para ofrecer la gama completa de movilidad urbana a los clientes.
Otto
Otto es una empresa americana que opera en el negocio de la conducción autónoma, la cual fue fundada en enero de 2016.
En agosto de 2016, es decir, siete meses más tarde de ser fundada, fue adquirida por Uber por $680M con la intención de poder entrar dentro del mercado de los coches autónomos.
En este caso Otto es la apuesta por no solo automatizar los coches, sino también entrar en el mercado de la distribución mediante los camiones y camionetas autónomas.
Complex Polygon
La adquisición de Complex Polygon se realizó en 2017, con el objetivo de adquirir talento en la producción de APPs y creación de interfaces.
En este caso la valoración de la compra no se ha hecho pública, si bien se calcula que está por debajo de los $56M, mediante esta compra, Uber se garantiza la adquisición de una docena de trabajadores muy cotizados para mejorar la interfaz de las APPs del grupo y mejorar la funcionalidad de las mismas.
En conclusión, UBER parece estar realizando una inversión bastante importante por afianzarse en mercados crecientes, evitando entrar en conflicto con países muy proteccionistas y buscando “monopolizar” en las grandes plazas mundiales, invirtiendo en aquellos países el cash obtenido de las desinversiones de China y del Sudeste Asiático.
Además de ese primer paso está buscando una inmersión en un negocio boyante como el de los vehículos autónomos, apostando no solo por el transporte de pasajeros, sino que entrando también en el sector del transporte.
Por último, está intentando buscar la mejora visual y funcional de las APPs para conseguir hacerlas más intuitivas y útiles, buscando una conversión y una normalización del uso diario de las mismas.