Doce mil antiguos alumnos de la Universidad Politécnica de Valencia ya se han lanzado al P2P lending y ofrecen préstamos a los treinta mil alumnos actuales de esa Universidad para que puedan afrontar el importante incremento que se ha producido en el precio de las matrículas universitarias. Les darán créditos de hasta 2.000 euros a un interés del 8% y un plazo de devolución de un año.
Según explica Manuel del Pozoen Expansión, la fórmula es muy sencilla. El estudiante que necesita el dinero entra en la página web de la Asociación de Antiguos Alumnos de la UPV, donde tendrá que explicar cuánto dinero necesita y para qué. Entonces entra en juego la empresa Comunitae –líder española en P2P lending–, que evalúa el perfil del solicitante y ofrece participar en el préstamo a los doce mil antiguos alumnos. Después, no es una sola persona la que presta todo el dinero a otra –lo que sería un riesgo elevado para el ahorrador–, sino que muchas personas prestan dinero a muchas otras, que, a su vez, reciben el total de su préstamo gracias a una multitud de pequeñas aportaciones.
En cada préstamo del P2P lending participan una media de 80 personas, que pueden aportar al total del crédito desde 50 euros hasta 1.000 euros. A su vez, cada ahorrador participa en tantos préstamos como quiera. El sistema de préstamos de Persona a Persona se apoya en el auge que están teniendo las redes sociales en Internet y en la antipatía que los grandes bancos provocan entre los internautas. En España, hay 20 millones de miembros de redes sociales (Facebook, Tuenti, Twitter o Linkedin), lo que supone un terreno abonado para que se desarrollen estos bancos populares 2.0.
Comunitae, que es la empresa pionera, nació en 2009 de la mano de Arturo Cervera, que procedía del mundo bancario tradicional. Tuvo muy poco éxito en sus inicios porque, aunque el funcionamiento de este tipo de transacciones es sencillo, resulta muy difícil encontrar internautas que estén dispuestos a asumir el riesgo de prestar dinero a través de la Red. Especialmente en España, donde existe una gran desconfianza a la hora de realizar operaciones financieras por Internet.
Ahora, la situación empieza a cambiar porque Comunitae ha conseguido la supervisión del Banco de España y la autorización para intermediar préstamos sin tener que convertirse en una entidad financiera. Esto favoreció que al capital de Comunitae se incorporaran inversores muy reconocidos en el mundo del ciberespacio: Cabiedes & Partners (fondo de capital riesgo que ha invertido en empresas de Internet como Privalia, Bankimia o Habittisimo), Good Investments (otro fondo de capital riesgo) y François Derbaix (fundador de Toprural.com).
El resultado es que, en los nueve primeros meses de este año, Comunitae ha intermediado 119 préstamos por valor de 525.350 euros, que han supuesto para los ahorradores una rentabilidad neta del 9,8%. Son cifras todavía muy pequeñas porque no son buenos tiempos para este tipo de préstamos por el incremento de la morosidad que sufren las entidades financieras. La gestión del riesgo en estas operaciones es fundamental, porque si se es permisivo se puede producir la situación que vivió la empresa Prosper en Estados Unidos, que llegó a tener una morosidad del 27%, tres veces más que la de la banca española.
Para minimizar estos riesgos, Comunitae trata de convertir a sus asociados en amigos, y sus directivos dicen que realizan una rigurosa evaluación del perfil del solicitante del crédito. Este año, Comunitae ha recibido 1.651 peticiones de préstamos, de las que ha aprobado finalmente 119, que es el 7,2% de las solicitudes.
Dada la gran cantidad de engaños financieros que se han producido en España en los últimos años, resulta muy difícil que los ciudadanos puedan llegar a fiarse de este tipo de intercambios ciberespaciales. Aunque si el P2P lending sirve para que muchos jóvenes puedan financiar sus estudios universitarios –como va a ocurrir en Valencia–, bienvenido sea.
Diego Gutiérrez Zarza
Web: www.abra-invest.com